En 2010, los dos físicos Sir Andre Geim y Sir Kostia Novoselov recibieron el Premio Nobel de Física. La razón de esto fue su innovador experimento con respecto al material bidimensional "grafeno". Desde entonces, los institutos de investigación han estado surgiendo como hongos para investigar la producción rentable y a gran escala de grafeno.

Ya en 2014, Andre Geim predijo que el desafío para que el nuevo material lo produjera de manera rentable sería mayor de lo esperado. Incluso si las grandes corporaciones invierten mucho tiempo y dinero en la investigación del grafeno, un resultado aceptable para la industria aún puede llevar hasta 40 años. Sin embargo, la ciencia espera mucho del grafeno, que consiste en grafito barato y es una alternativa ideal al anterior óxido de indio y estaño (ITO). Esto se debe a que los resultados de la investigación individual logrados hasta ahora proporcionan una idea de las aplicaciones futuras del grafeno.

Debido a las muchas propiedades positivas del grafeno, su uso futuro en las siguientes áreas de aplicación es concebible:

• para aplicaciones de teléfonos inteligentes transparentes y, sobre todo, flexibles, ya que se puede estirar hasta un 20% sin dañar el material.
• para portátiles transparentes, porque la transparencia es del 97,3%
• para medios de transporte y aviones particularmente ligeros, pero al mismo tiempo fuertes y eficaces, porque el grafeno es más ligero que el algodón, pero más fuerte que el acero.
• para su uso en células solares, porque es uno de los mejores conductores de calor.
• para pequeños chips de computadora que requieren electrónica rápida, porque los electrones se mueven aproximadamente 200 veces más rápido que en el silicio debido a su muy buena conductividad.

Así que puedes ver el enorme potencial económico del grafeno que tiene debido a sus múltiples ventajas. Tenemos curiosidad por ver si realmente pasarán hasta 40 años antes de que surja una solución adecuada para la producción industrial.