Monitor industrial de acero inoxidable Monitor de alimentos con pantalla táctil
Para garantizar la fiabilidad de su pantalla táctil, no sólo hay que tener en cuenta factores como la tecnología adecuada y el refinamiento de la propia pantalla, sino también la selección de la placa de soporte adecuada.
Placa portadora adecuada para cada aplicación
Cada ámbito de aplicación y entorno de trabajo conlleva riesgos específicos que pueden estresar el material de la placa portadora y, por tanto, influir también en la vida útil.
Interelectronix le ofrece la posibilidad de elegir entre placas portantes de plástico, aluminio y acero inoxidable. Los materiales pueden adaptarse aún más individualmente al entorno de trabajo mediante determinados procesos.
Además, es posible adaptar perfectamente las placas portantes al área de aplicación prevista mediante diferentes tratamientos superficiales y revestimientos y cumplir especificaciones de diseño especiales.
Ventajas de las placas portantes de acero inoxidable
Las placas portantes de acero inoxidable se caracterizan por la gran resistencia del material y ofrecen una protección especialmente buena en las zonas de aplicación más duras.
Por ello, las pantallas táctiles PCAP y ULTRA se suelen revestir con placas de soporte de acero inoxidable, ya que tienen propiedades de resistencia similares a las de las superficies de las propias pantallas táctiles.
El acero inoxidable es un material muy robusto que puede soportar cargas térmicas y mecánicas en alto grado. Además, es resistente a la corrosión, no se oxida y tiene una superficie lisa en la que no pueden depositarse depósitos.
La mejor solución para aplicaciones duras
Al igual que las placas portantes de aluminio, las placas de acero inoxidable son una solución fiable, resistente y de peso optimizado que resulta ideal para su uso en un entorno de trabajo duro como la construcción o la producción industrial, pero también en el sector militar.
Su buena resistencia a los ácidos también permite su uso en entornos expuestos a productos químicos.
Además, el acero inoxidable tiene la gran ventaja de poder utilizarse sin restricciones incluso en rangos de temperatura elevados. El material sólo tiene una baja conductividad térmica, por lo que se dilata muy poco.